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  PNEUMATOLOGIA
 

ESPÍRITU SANTO

Pasaje: Jn.14:15-17; 16:5-15.

El estudio de la doctrina del Espíritu Santo, reviste una importancia tal que ningún creyente debiera desconocer nada referente a ella. Todo cristiano tiene necesidad de la presencia poderosa de Dios, el Espíritu Santo, en su vida, sin cuya ayuda no es posible vivir las demandas divinas para la vida de santificación y servicio a Dios.

 

I. SU PERSONA

1. La Biblia revela que el Espíritu Santo es Dios.

  • 1.1. En el triple nombre de la Deidad (Mt.28:19).

  • 1.2. En la enseñanza del Nuevo Testamento (Hch.5:3-4; 1.Cor.2:10-11; Ef.2:22).

2. Pruebas bíblicas de la personalidad del Espíritu Santo.

  • 2.1. Es tratado siempre como una persona, (1.Cor.2:10-12).

  • 2.3. Se le atribuyen obras personales.

    • 2.3.1. Intercesión por los santos, (Rom.8:27).

    • 2.3.2. Reparte dones como El quiere, (1.Cor.12:8-11).

    • 2.3.3. Puede ser contristado, (Ef.4:30).

  • 2.4. Posee atributos propios de una persona.

    • 2.4.1. Intelecto, (Is.11:2; Ef.1:17; Jn.14:26; 15:26; Rom.8:16).

    • 2.4.2. Sensibilidad, (Gen.6:3; Is.63:10; Rom.8:26; Ef.4:30).

    • 2.4.3. Voluntad, (1.Cor.12:11; Hch.16:7).

  • 2.5. Hace obras propias de una persona.

    • 2.5.1. Oye (Jn.16:13).

    • 2.5.2. Escudriña, (1.Cor.2:10-11).

    • 2.5.3. Habla (Hch.8:29; 13:2; 16:6-7).

    • 2.5.4. Enseña, (Jn.14:26).

    • 2.5.5. Juzga (Hch.15:28).

    • 2.5.6. Convence de pecado (Jn.16:8).

    • 2.5.7. Ejerce voluntad (1.Cor.12:8-11).

    • 2.5.8. Escoge y envía (Hch.13:2; 20:28).

    • 2.5.9. Guía (Rom.8:14).

    • 2.5.0. Intercede (8:26).

           

II. LA DEIDAD DEL ESPÍRITU SANTO.

1. Sus nombres.

  • 1.1. La Biblia le llama Dios: (Hch.5:3-4; 1.Cor.3:16 con 6:19; 12:6-7; Ex.17:7 comp. Is.63:10-11; 2.Tim.3:16 con 2.P.1:21).

  • 1.2. Se le llama Señor (2.Cor.3:17).

2. Posee atributos divinos.

  • 2.1. Eternidad (Hb.9:14).

  • 2.2. Omnipotencia (1.P.3:18; 1.Cor.15:19).

  • 2.3. Omnipresencia (Sal.139:7-10).

  • 2.4. Omnisciencia (Is.40:13-14; 1.Cor.2:10-11).

  • 2.5. Amor (Gal.5:22).

  • 2.6. Verdad (1.Jn.5:6).

  • 2.7. Santidad.

    • 2.7.1. Su propio nombre expresa esta perfección.

3. Realiza obras divinas.

  • 3.1. Creador (Gen.1:2; Job.26:13; 27:3; 33:4; Sal.33:6; 104:30).

  • 3.2. Contención (Gen.6:3).

  • 3.3. Inspirador de la Escritura (2.P.1:21; 2.Tim.3:16).

  • 3.4. Concepción de Jesucristo (Lc.1:35).

  • 3.5. Regeneración del pecador (Tit.3:5).

  • 3.6. Iluminación (2.Cor.4:3-4).

    • 3.6.1. Apertura del entendimiento hacia las Escrituras (Jn.16:13).

    • 3.6.2. Revelación comprensible de Dios (1.Cor.2:9-10).

  • 3.7. Santificación (Heb.10:14-15; 2.Tes.2:13; 1.P.1:2).

       

III. EL ESPÍRITU SANTO EN EL A. TESTAMENTO

1. En la creación (Gen.1:2; Job.26:13; 33:4; Sal.33:6; 104:30).

2. Desde la creación hasta Abraham.

  • 2.1. Contendió con los hombres.

    • 2.1.1. Redarguyéndolos (1.P.3:19-20).

    • 2.1.2. Deteniendo la degradación total.

  • 2.2. El Espíritu Santo revelador de la verdad.

    • 2.2.1. Seleccionando a los profetas para dar a conocer la verdad divina, especialmente la referida a los juicios de Dios (Jud.14-15).

    • 2.2.2. Revelando verdades divinas directamente a los hombres cuando aún no había Palabra escrita.

      • (1) Lo que se dice de Abraham (Gen.26:5).

      • (2) El mensaje que predicó Noé le fue dado por Dios, ya que la Biblia lo llama "predicador de justicia" (2.P.2:5).

3. Desde Abraham hasta Cristo.

  • 3.1. Actividades providenciales.

    • 3.1.1. Revelación de la verdad al pueblo judío como base para la transmisión escrita de la Revelación.

    • 3.1.2. Capacitaba hombres para tareas concretas (Ex.31:1-6).

    • 3.1.3. Dotaba de fortaleza a hombres para ejecutar empresas divinas (Jue.13:25; 14:6).

    • 3.1.4. Señalaba y capacitaba reyes (1.Sam.16:13).

  • 3.2. Autor de la profecía (2.P.1:21).

4. La inspiración de la Escritura.

  • 4.1. Selección del autor humano (Jer.1:5).

  • 4.2. Revelación del mensaje a transmitir (Jer.1:9).

IV. EL ESPÍRITU SANTO EN LA VIDA DE JESUCRISTO

1. En la concepción de Jesucristo (Lc.1:35).

  • 1.1. Jesucristo fue encarnado por instrumentalidad del Espíritu Santo (Mt.1:20; Lc.1:35).

2. El Espíritu Santo en la niñez y juventud de Cristo.

  • 2.1. Jesús se llenaba de sabiduría y de gracia (Lc.2:52).

3. En el bautismo de Jesucristo (Mt.3.13-17; Mr.1:9-11; Lc.3:21-22).

4. En el ministerio terrenal de Jesucristo.

  • 4.1. El Espíritu Santo se manifestó en plenitud en Cristo (Is.11:2-3; 42:1; 61:1; Jn.3:34).

  • 4.2. Los milagros de Cristo fueron hechos divinos ejecutados en el poder del Espíritu Santo (Mt.12:28).

  • 4.3. El Espíritu Santo controló e impulsó acciones de Jesús (Mr.1:12; Lc.4:1,14; Mt.4:1).

5. En el sacrificio de Cristo (Heb.9:14).

6. En la resurrección de Cristo (Rom.1:4; 8:11; 1.P.3:18).

 

V. EL ESPÍRITU SANTO EN LA ACTUAL DISPENSACIÓN

1. El descenso del Espíritu Santo.

  • 1.1. El acontecimiento del día de Pentecostés (Hch.2:2-4).

    • 1.1.1. Cumplimiento de la promesa de Cristo (Jn.14:16-17).

    • 1.1.2. El Señor les mandó esperar la venida del Espíritu Santo antes de iniciar la evangelización (Lc.24:49; Hch.1:8).

  • 1.2. Las palabras del discurso de Pedro (Hch.2:16-21).

    • 1.2.1. No tiene tanta importancia si su cumplimiento fue parcial o total, sino más bien, que Pedro las utilizó para indicarles la manifestación de poder propia de la apertura de una nueva dispensación, la actual, que debe llamarse la "Dispensación de la Iglesia"

2. Actividad del Espíritu Santo en la actual dispensación.

    • 2.1. El oficio bautizador del Espíritu Santo fue algo desconocido en anteriores dispensaciones (1.Cor.12:13).

    • 2.2. La formación de un cuerpo en Cristo (Ef.2:20-22).

    • 2.3. La residencia del Espíritu Santo en cada creyente.

      • 2.3.1. Antes de Pentecostés estaba con los creyentes (Jn.14:17).

      • 2.3.2. Después de Pentecostés esta en cada creyente. (Jn.14:17; 1.Cor.3:16-17; 6:19-20).

3. El Espíritu Santo controlador del cosmos.

  • 3.1. El control actual sobre el avance del mal en su manifestación concreta del hombre de pecado (2.Tes.2:3-10).

  • 3.2. "El que impide" no puede ser otro más que el Espíritu Santo, ya que ha de ser una persona debido al uso del pronombre él.

 

VI. EL ESPÍRITU SANTO EN LA SALVACIÓN

1. Los elementos esenciales en la salvación.

  • 1.1. Convicción personal de pecado.

  • 1.2. Fe salvadora en Jesucristo.

  • 1.3. Regeneración espiritual.

  • 1.4. Ninguno de ellos proviene del esfuerzo humano ya que la salvación es por gracia mediante fe. (Ef.2:8-9).

  • 1.4. La Biblia enseña que todos ellos se manifiestan en razón de la obra del Espíritu Santo en el pecador.

2. Iluminación y ayuda personal.

  • 2.1. La enseñanza de Cristo (Jn.16:7-8).

  • 2.2. El ser humano es incapaz de creer, aparte de la acción iluminadora del Espíritu Santo.

    • 2.2.1. Lo que es la cruz para el hombre natural (1.Cor.1:18,22,23).

    • 2.2.2. Lo que es la cruz para el regenerado (1.Cor.2:10-13).

    • 2.2.3. El Agente revelador: El Espíritu Santo (1.Cor.2:10-13).

  • 2.3. La incapacidad general (1.Cor.2:14).

    • 2.3.1. El hombre natural no tiene capacidad de alterar esta condición.

    • 2.3.2. El inconverso, por sí mismo, no puede percibir las cosas de Dios.

    • 2.3.3. Es incapaz hasta ser capacitado por el Espíritu Santo.

  • 2.4. La ceguera espiritual general (2.Cor.4:3-4).

    • 2.4.1. Ceguera mental impuesta por Satanás para que no les alcance el evangelio.

3. La obra de convicción del Espíritu Santo (Jn.16:7-11).

  • 3.1. Convicción de pecado (Jn.16:8).

    • 3.1.1. Nótese la palabra en singular, no en plural. La convicción es sobre un solo pecado: Rehusar creer en Jesucristo (Jn.3:36; 16:9).

    • 3.1.2. Es realmente la revelación de un pecado que quebranta un mandato divino (Hch.17:30).

  • 3.2. Convicción de justicia (Jn.16:8).

    • 3.2.1. La justicia no es un esfuerzo humano sino un don divino. (Rom.5:17).

    • 3.2.2. Por este don el pecador es acepto delante de Dios (Ef.1:6).

  • 3.3. Convicción de juicio. (Jn.16:8).

    • 3.3.1. No es de un juicio futuro sino de un juicio pasado, en el cual Satanás fue juzgado y vencido en la cruz (Col.2:13-15).

4. Regeneración espiritual.

  • 4.1. Tiene que ver con la implantación de Cristo en el creyente (Col.1:27).

  • 4.2. Produce una resurrección espiritual (Ef.2:1,4-5).

  • 4.3. Trae la unión vital con Cristo (1.Cor.12:13).

    • 4.3.1. Imprescindible para recibir vida eterna (Jn.3:16).

    • 4.3.2. Esa vida no es otra que la de Cristo resucitado (Jn.14:6; 10:10; Rom.6:23).

  • 4.4. Una nueva naturaleza como corresponde a un nuevo principio de vida (2.P.1:4; Rom.6:23; Col.1:27).

  • 4.5. Dotación de un corazón nuevo, similar a lo que ocurrirá con Israel salvo en el reino (Ez.11:19; 36:26-27).

5. La fe salvadora.

  • 5.1. La fe es un don de Dios (Ef.2:8-9; Rom.4:16).

  • 5.2. La fe aplicada que es "creer en Cristo", es una concesión divina (Fil.1:29).

6. La santificación imputada.

  • 6.1. Cristo es también santificación para el regenerado (1.Cor.1:30).

  • 6.2. En la santificación en toda su extensión es imposible sin la intervención del Espíritu Santo.

    • 6.2.1. En la santificación posicional (2.Tes.2:13; 1.P.1:2).

    • 6.2.2. En la santificación práctica (Rom.15:16; 1.Cor.6:11).

           

VII. EL BAUTISMO DEL ESPÍRITU SANTO

1. El Espíritu Santo bautiza a todo creyente en Cristo para que pase a formar parte de su cuerpo (1.Cor.12:13).

  • 1.1. El creyente es unido vitalmente a Cristo y puesto en El (Jn.14:20).

  • 1.2. La oración intercesora sobre la unidad, se cumple por la acción bautizadora del Espíritu (Jn.17:11,21, 22,23).

  • 1.3. Es el único modo para recibir la justicia imputada (Rom.4:23-24; 5:17; 8:1; 2.Cor.5:17,21).

  • 1.4. Único modo de ser aceptos por Dios (Ef.1:3,6).

  • 1.5. Todo salvo ha sido bautizado por el Espíritu Santo en el momento del nuevo nacimiento, quien no lo ha sido, no ha sido salvo jamás.

       

 

VIII. LA PLENITUD DEL ESPÍRITU

1. La plenitud del Espíritu es el dominio pleno que ejerce su Divina Persona en el creyente que rinde incondicionalmente su vida a su control y vive bajo su plena influencia y dirección.

  • 1.1. Al creyente se le manda ser lleno del Espíritu Santo (Ef.5:18).

  • 1.2. La plenitud del Espíritu es vital para la vida de testimonio (Hch.1:8; Lc.24:48-49).

  • 1.3. La plenitud es necesaria para una vida victoriosa (Jn.15:5; Fil.4:13; Rom.8:2).

  • 1.4. Sólo es posible vivir vidas victoriosas bajo la dirección y control poderosa del Espíritu Santo (Zac.4:6).

       

IX. EL FRUTO DEL ESPÍRITU

1. Las manifestaciones que conforman el fruto del Espíritu, son actividades sobrenaturales que el Espíritu opera en el creyente (Gal.5:22).

  • 1.1. Las tres primeras en relación con Dios.

  • 1.2. Las tres siguientes con el prójimo.

  • 1.3. Las tres finales con el propio creyente.

2. Condiciones para la plenitud y el fruto del Espíritu.

  • 2.2. No contristar al Espíritu Santo. (Ef.4:30).

    • 2.2.1. Se le contrista cuando hay pecado sin confesar.

  • 2.2. No apagar el Espíritu (1.Tes.5:19).

    • 2.2.1. Se apaga cuando se le resiste.

  • 2.3. Andar en el Espíritu (Gal.5:16).

    • 2.3.1. Se anda en El cuando se somete la vida a su control y conducción.

           

 

X. LOS DONES

1. Don es un regalo de Dios.

  • 1.1. Los dones de Dios son irrevocables (Rom.11:29).

2. El Espíritu Santo es el dador de los dones (Rom.5:5; 1.Cor.12:4,11).

  • 2.1. Se otorgan por un acto soberano de Dios (1.Cor.12:11).

  • 2.2. Se otorgan a todos los creyentes (1.Cor.12:11).

  • 2.3. Se otorgan sin atención a mérito personal alguno (1.Cor.12:11).

  • 2.4. Se otorgan para provecho de la Iglesia y no del que los recibe (1.P.4:10).

  • 2.5. Las listas de los dones (1.Cor.12; Rom.12; Ef.4).

       

XI. APLICACIÓN PERSONAL

1. El creyente necesita estudiar la doctrina del Espíritu Santo para "andar en El" y "no proveer para la carne" (Gal.5:16), mientras va haciendo en el cristiano la obra de hacerle "semejante" a Cristo (Rom.8:29).

2. El Espíritu Santo es Dios glorioso y santísimo.

  • 2.1. Habita en el creyente (1.Cor.3:16).

  • 2.2. Siendo morada del Espíritu Santo, el creyente debe procurar la santidad sobre todas las cosas (2.Cor.7:1; Ef.4:22-24; 1.Tes.3:13; Heb.12:14; 1.P.1:15-16).

3. Cristo es el ejemplo y meta del creyente (Heb.12:1-2).

  • 3.1. El creyente debe aprender cual fue la relación del Señor con el Espíritu para procurar su misma forma de vida.

  • 3.2. Cristo anduvo en el Espíritu, así también el creyente (Gal.5:16).

  • 3.3. Como Cristo vivió en la plenitud del Espíritu, así también el creyente (Ef.5:18).

4. El creyente que ha sido bautizado en Cristo por el Espíritu debe vivir a Cristo (Fil.1:21; Gal.2:20).

5. Quien anda en el Espíritu manifestará el carácter moral de Cristo en el fruto del Espíritu (Gal.5:22-23).

6. El que ha sido puesto en Cristo por el bautismo del Espíritu Santo ha crucificado la carne con sus pasiones y deseos (Gal.5:24).

7. El creyente necesita del poder del Espíritu para vencer al mal (Zac.4:6).

8. La plenitud del Espíritu sólo se consigue con una vida rendida a Dios, de ahí la exhortación de Pablo (Rom.12:1).